Las ansias de bajar por zonas desconocidas de nieve pueden pasar factura

No todo es nieve lo que reluce. Hay que conocer la montaña y ser cauto antes de lanzarse a la aventura. Eso es lo que le pasa al esquiador del vídeo.

El esquiador se da cuenta tarde que accede a una zona sin nieve y peligrosa
El esquiador se da cuenta tarde que accede a una zona sin nieve y peligrosa

Sea el Freeride o el Freestyle, ambas modalidades son cada vez más habitual entre los incondicionales del deporte blanco. Unas actividades reservadas a esquiadores y surfers, con un nivel técnico medio y alto en pistas. Pero sobre todo, hay que tener la cabeza amueblada antes de descender. Sino que se lo pregunten al del vídeo.

El esquiador creía que todo lo que tenía por delante era nieve… Y miren lo que pasa a la mitad del vídeo


Las acrobacias, los saltos o los peraltes no perdonan errores. Y si ambas modalidades proporcionan grandes dosis de diversión y libertad, hay que ser cauto antes de dar rienda suelta a la bajada.

 

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