Al otro lado de la frontera, Artouste esconde el secreto mejor guardado. Alejado de las aglomeraciones, el centro invernal descubre un mágico y salvaje espacio para los deportes de invierno. A punto para la apertura, la estación celebra su 50 aniversario con muchas novedades y grandes ofertas, dirigidas a las familias.
La estación abre las pistas el próximo 23 de diciembre
Ubicada en los Pirineos Atlánticos, el pueblo de Fabrèges – Artouste ofrece a todos los amantes de esquí y de naturaleza, un entorno excepcional. En este sentido, los 25 Km de descensos hacen las delicias a todos los aficionados. Debutantes, esquiadores confirmados o riders, cada uno de ellos encontrará su espacio en la estación francesa.
Un aniversario por todo lo alto
La estación francesa tiene todo a punto para abrir las pistas el sábado próximo con una batería de novedades. Y es que Artouste quiere celebrar la Navidad con los esquiadores, además de soplar las velas por el 50 aniversario de apertura con todos ellos.

El centro estrena el telecabina de Sagette, adquirido por Artouste a finales del 2016. Más cómodo, espacioso y tranquilo, permite disfrutar de los 8 minutos que dura el ascenso, los maravillosos paisajes y del gran Pic du Midi de Ossau, a la vez que permite parar y facilita el embarque y desembarque. Además, es accesible para personas con movilidad reducida y tiene capacidad para 6 personas.
Esquiar en familia en Artouste tiene premio este invierno. El nuevo forfait familia, apto a partir de tres personas y un máximo de seis, ofrece el abono gratuito al 3r y 4º hijo.
Artouste, la naturaleza en estado puro
Sus imponentes montañas invitan a dejar las trazas en la nieve después de una gran nevada. De esta forma, entre los 1400 y los 2100 metros de altitud, cerca de la localidad de Pau, Artouste abre un total de 150 hectáreas con 17 pistas de nieve donde deporte y libertad viven en perfecta armonía.

El sector Seous abre un amplio paraíso a los amantes del freestyle y del freeride, con snowpark, snow cross y boardercross. El Snowpark evolutivo permite aprender a esquiar o perfeccionar su técnica a los esquiadores de todos los niveles.
Las pistas rojas y negras ofrecen las sensaciones máximas a los que adoran la nieve polvo. Y por su parte, los principiantes lo tienen francamente bien en el sector de Sagette, situado en la llegada del telecabina.
Barrancos en la nieve, gastronomía y esquí en libertad
Si existe un lugar en el mundo donde practicar el Freeze Canyon, sin duda es Artouste. Cubierto de nieve, el invierno es el momento perfecto para descubrir los barrancos. La actividad , acompañada por un instructor calificado, incluye saltos, rápeles y toboganes.

Los amantes de la nieve virgen y el skimo tienen una cita en el centro invernal. El Dúo esquí ofrece un día de esquí fuera pistas y otro para la práctica del esquí de travesía. Una excusa perfecta para subir hasta las cimas de Canaourouye, Peyreget o Aneou y dejar la rúbrica sobre el elemento blanco.

Finalmente, los paseos nocturnos con raquetas de nieve acompañados por una deliciosa raclette en un restaurante de alta montaña optimizarán la estancia en Artouste. Y si imprescindibles son las impresionantes vistas hacia el Pic du Midi desde el hotel Pourtalet, no menos lo es la zona de spa de La Cascada.