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Masella pondrá punto y final a la temporada más atípica de la historia del esquí domingo próximo 11 de abril. La estación catalana, conocida en el Pirineo como la primera en abrir y la última en cerrar, se ve obligada a cerrar por las restricciones comarcales.
La flexibilización de las medidas sanitarias en Catalunya desde el 15 de marzo daba un respiro al sector de la nieve. La estación, al igual que el resto de las pistas catalanas, abrían más descensos. No en vano, pudieron afrontar una Semana Santa con cierto optimismo. Sin embargo, la comunidad catalana ha dado un paso atrás y ha vuelto a implantar el confinamiento comarcal.
Masella cierra una campaña para olvidar
La estación de esquí de Masella anunciaba hace escasos días la prolongación de la temporada hasta final del mes de abril. Pero no ha podido ser. Los cierres prolongados de todo el invierno han pasado factura.
El Gobierno de Catalunya obligó a demorar la apertura en noviembre. Y no fue hasta el 14 de diciembre cuando dio carta verde. Pero la alegría duró poco. El confinamiento perimetral a las puertas de Navidad dejó sin clientes una de las fechas más importantes del invierno. Un cierre que en esta zona se alargó hasta mitad de marzo.
Pero la alegría ha durado poco. La estación, acostumbrada a cerrar cuando finaliza la nieve, ha recibido otro revés. Ante la imposibilidad de llegada de clientes de la ciudad condal y proximidades, Masella no ha tenido más remedio que echar el cerrojo a una campaña para olvidar.
