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Cuando después de década y media de esquiar con un anorak tradicional, con el que no se pasa frío por mucho que haga pero que no impide que aparezca el sudor cuando se acaba un intenso descenso y la temperatura templa el ambiente, se prueba la Elevation Shell Jacket de Helly Hansen y la sensación de levitar es inmediata.
Es una prenda muy ligera, completísima y llena de detalles. Paravientos perfecto, hay que añadirle capas a medida que el frío se intensifica. Todo es cuestión de saber calibrar la intensidad del ejercicio en una pista o fuera de ella para dar con la combinación cabal. Pero más o menos cada uno ya sabe sus hábitos sobre la nieve, su manera de esquiar, los terrenos por los que transita y la intensidad con la que se acomete la bajada.
Compañera inseparable
Sabiendo esto, la Elevation Shell Jacket se vuelve al cabo de un par o tres días en la compañera inseparable de las jornadas de esquí, independientemente del tiempo que haga. Claro que cuando sopla fuerte el viento y la nieve cae como si no hubiera un mañana es cuando más se valora las prestaciones de esta prenda de la marca noruega. Por el contrario, cuando el día está presidido por el sol su transpirabilidad permite seguir seco gracias a su sistema de ventilación H²Flow™.
Sorprende lo mucho que aísla, lo rápido que se seca y se agradece los múltiples detalles que incorpora. Los bolsillos son amplios y protegidos por cremalleras, lo mismo que las aberturas de ventilación, y la chaqueta se ha actualizado con el LifePocket, que alarga la vida de la batería a bajas temperaturas.
Múltiples detalles y producto galardonado
No acaban ahí los detalles. Como medida para ayudar a la seguridad, la Elevation Shell Jacket equipa remates y ribetes de alta visibilidad, que seguro que se agradece en caso de apuro si hay necesidad de ser localizado. Da lo mismo el tipo de guante o manopla que se utilice. Por grueso que sea cabrá perfectamente en unos amplios puños ajustables.
El tejido flexible de la espalda facilita el uso de mochilas o de ‘tortugas’. La capucha es amplia, ajustable y desmontable, con visera incorporada, el cuello es alto y permite olvidarse del buff, uno de los bolsillos lleva sujeto un paño para limpiar las gafas y los hay también en la manga para llevar el forfait e interiores para gafas y aparatos electrónicos. Incorpora el avanzado sistema de rescate Recco®. Las muñequeras tienen orificio para el pulgar, las cremalleras son impermeables y las dos capas del tejido se unen en costuras completamente selladas. Un faldón desmontable con cremallera es un complemento que agradecerán los freeriders.
La calidad de la Elevation Shell Jacket de Helly Hansen ha sido reconocida con el galardón Red Dot Design y es el producto más premiado de la marca noruega en sus 140 años de existencia.
Wasatch Shell Pant, el complemento ideal
El complemento ideal a la Elevation Shell Jacket es el Wasatch Shell Pant de Helly Hansen. Vuelve a sorprender su ligereza y todo lo que hasta aquí se ha explicado de la chaqueta es aplicable a los pantalones. Para los freeriders se han incorporado botones para unir los pantalones a la chaqueta, los bolsillos son algo más bajos para facilitar su acceso y las ventilaciones están situadas de manera que liberan calor con mayor eficacia.
