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Ordino Arcalís acoge el fin de semana el mejor espectáculo de freeride. Y lo hará con la única competición de la disciplina que se disputa en los Pirineos, en el marco del Freeride World Qualifier (FWQ) con la Jam Extreme y el Freeride Junior Tour.
La Jam Extrem, última parada del freeride internacional en Ordino
La Jam Extrem (9 de abril) cuenta este año con una inscripción máxima de 120 participantes provenientes de 19 países diferentes. La prueba, a cargo de Nevesky Management, pretende dar una buena oportunidad a todos los aspirantes a acceder al Freeride World Tour en un futuro.
Además, es de las últimas pruebas de tres estrellas del circuito europeo FWQ, un hecho relevante, ya que los puntos del ranking del FWQ para la temporada 2023 que dan acceso a las competiciones de cuatro estrellas se inician con estas carreras de final de temporada. Así, los mejores corredores de Europa vienen para garantizar un buen inicio para la siguiente temporada.
La estación recupera el Freeride Junior Tour
Por otro lado, los jóvenes también tendrán protagonismo en la estación andorrana, el mismo fin de semana, con el Freeride Junior Tour Ordino Arcalís by Dynastar (10 de abril). La competición no pudo realizarse durante las fechas previstas el pasado febrero por las condiciones que presentaba el terreno y se ha aplazado al próximo domingo. En esta ocasión, unos ochenta jóvenes de unos 10 países diferentes podrán demostrar su potencial, al tiempo que podrán compartir momentos de entrenamiento y competición con los riders adultos que, en el caso de los U18, serán rivales en la próxima temporada.
FOTO: Ordino Arcalís
Tanto la JAM como el FJT forman parte del cierre de la temporada 2022, lo que provoca que todo el colectivo del freeride europeo se interese por los resultados y las imágenes que se derivan.
Sin embargo, el fin de semana de freeride no pretende ser exclusivo para los corredores, es un espectáculo para disfrutar y pasar unas jornadas diferentes en familia o con amigos. Por eso se ha escogido una zona idónea que permite observar la competición desde las mismas pistas de esquí y con todas las comodidades que esto implica. Concretamente, el Port del Rat.
