Las cinco pequeñas joyas que esconde el Pirineo francés

El Pirineo francés esconde pequeñas estaciones de dimensiones humanas y ambiente familiar, como Goulier Neige, Bourg d'Oueil, Ascou, Camurac y Le Chioula

Le Chioula, 17 kilómetros de senderos nórdicos.
Le Chioula, 17 kilómetros de senderos nórdicos.

El Pirineo francés esconde una serie de pequeñas estaciones, desconocidas para el gran público, que ofrecen un encanto especial en unos dominios de dimensiones humanas. Nada que ver con el esquí de fin de semana masificado al que ya nos hemos acostumbrado.
De las cinco a destacar, la mayoría de estas pequeñas estaciones se ubican en la región de Ariège y cuentan, además del esquí, con un patrimonio cultural y un entorno que otros enclaves no pueden ofrecer.

Goulier Neige es la más reducida, con sus siete kilómetros repartidos en ocho pistas.
Goulier Neige es la más reducida, con sus siete kilómetros repartidos en ocho pistas.

Goulier Neige, la benjamina

Coronando el pueblecito de Goulier, entre 1.500 y 1.900 metros de altitud, se alza la más pequeña del Pirineo francés. La única estación del valle del Montcalm, en Ariège. Goulier Neige, de tan solo siete kilómetros y con ocho pistas de esquí alpino, está rodeada de los picos de Garbié de Brésoul (2.047 m) y Pédrix (2.213 m), en la cara nornoroeste del Pique d’Endron (2.472 m). Nieve familiar, naturaleza para los esquiadores más experimentados y también pistas fáciles para los principiantes. Tarifas y más información en la web de la estación.

Además de su estación de esquí, Boug d'Oueil ofrece un respetable patrimonio cultural.
Además de su estación de esquí, Boug d’Oueil ofrece un respetable patrimonio cultural.

Bourg d’Oueil, la oferta más variada

Con apenas diez kilómetros esquiables, Bourg d’Oueil, en plena Alta Garona, ofrece un entorno natural preservado entre 1.350 y 1.660 metros de altitud. A 15 kilómetros de Luchon, ofrece además del esquí una amplia variedad de actividades y un magnífico patrimonio cultural visitable. Todos los detalles, en su web.

Camurac, nieve y estrellas.
Camurac, nieve y estrellas.

Camurac, el camino a las estrellas

En la región del Aude, entre 1.550 y 1.800 metros, está Camurac, la estación de las estrellas, con 15 kilómetros y once pistas. Debe su nombre al Observatorio ‘Chaumine aux étoiles’, en la entrada de la estación. Cuenta con interesantes talleres relacionados con el sistema solar. La web de la estación especifica su oferta.

Ascou, familiar y de talla humana.
Ascou, familiar y de talla humana.

Ascou, en el corazón del bosque

El puerto de Pailhères y el paso de Pradel, a 2.000 metros de altitud, descubren un magnífico paisaje cubierto de nieve y abetos a lo largo de los 17 kilómetros que conforman la estación de Ascou-Pailhères, en Ariège. Estación familiar y de talla humana, cuenta con 17 pistas, frecuentadas por los 122 habitantes del pueblo de Ascou. Más detalles en la web.

Le Chioula, 17 kilómetros de senderos nórdicos.
Le Chioula, 17 kilómetros de senderos nórdicos.

Le Chioula, la belleza nórdica

Entre 1.240 y 1.725 metros de altitud, al pie de los vestigios del castillo cátaro de Montaillou y en lo más profundo del bosque, se halla Le Chioula, la bella estación nórdica del Ariège. Un resort de naturaleza benévola y pacífica, cuyos senderos nórdicos siguen la ruta natural y suave de los caminos rurales y aldeas a lo largo de 17 kilómetros. Todos los datos en www.chioula.fr.

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