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San Isidro se disponía este miércoles a acondicionar algunas pistas del centro invernal tras las nevadas. Los trabajos se centraban en la apertura de la vertiente de Vegarada desde Cebolledo y de esta manera poder ampliar la oferta esquiable durante el fin de semana.
No en vano, los sectores de Riopinos y Cebolledo estaban inaccesibles por el alto riesgo de aludes. Desafortunadamente, un desprendimiento de nieve caía sobre una de las máquinas pisapistas.
Por fortuna, no hubo que lamentar daños personales tras el suceso. Si bien, una de las máquinas que resultaba ser de reciente adquisición se vio afectada con ligeros daños aún por evaluar.
Los esquiadores pedían desde hacía dias la apertura total de las pistas de San Isidro
No es la primera vez que un alud cae sobre una máquina pisapistas en San Isidro al tratar de acondicionar pistas tras una fuerte nevada, como ya ocurriera en la temporada 2015/2016 también sin desgracias personales.
La estación llevaba esperando a que se se estabilizara la nieve para que pudieran acondicionar nuevas pistas y pasar a Riopinos desde que terminó de nevar. Los trabajos se hicieron efectivos cuando el riesgo de aludes era aparentemente más bajo. No obstante, la nieve se vino abajo en uno de los lugares donde precisamente se esperaba que pudiera ocurrir.
La estación había recibido quejas por parte de los usuarios que manifestaban su descontento por no tener la estación abierta el 100% pese al riesgo de aludes existente. Responsables de San Isidro, han asegurado el cierre por prudencia hasta que no baje el riesgo de aludes.
«La vida de los trabajadores y la seguridad de los propios esquiadores que tienen que pasar obligatoriamente por esa zona para enlazar Riopinos con Cebolledo y viceversa está por encima de cualquier otra consideración».
