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Otro fin de semana intenso de rescates derivados de actividades como el barranquismo, montañismo y senderismo. Los equipos especializados de la Guardia Civil de Huesca han realizado catorce nuevas intervenciones de viernes a domingo en el Pirineo aragonés, la sierra de Guara y el Moncayo.
El fin de semana se salda con nuevos percances de montaña. Una docena de personas han resultado heridas -siete trasladadas a distintos hospitales y el resto atendidas en centros de salud-, y tres ilesas.
En los rescates han participado miembros del GREIM de Benasque y Boltaña, EREIM de Huesca y Panticosa, del SEREIM de Jaca, apoyados por el helicóptero de la Guardia Civil y médicos del 061.
Unos rescates que comenzaron el viernes
El viernes ya se realizaron dos intervenciones para evacuar a dos barranquistas accidentados en Alquézar y en Broto. Una mujer alemana de 32 años se lesionó el tobillo en un salto en el barranco del Vero. Mientras que a un hombre de 32 años, vecino de Huesca,se le salió un hombro en el barranco del Forco.
Un sábado intenso
FOTO: Heraldo.es
Otro barranquista tuvo que ser socorrido el sábado a media mañana. En este caso una francesa de 56 años, cuando sufrió una caída en la Peonera y la llevaron al hospital con una lesión en el hombro.
El accidente más grave del sábado ocurrió en el ascenso al pico Marboré (Torla). Una zaragozana de 60 años se cayó en una zona muy escarpada. Presentaba lesiones en la cabeza, en las piernas y una fractura en un brazo.
Minutos después, la Guardia Civil recibía un nuevo aviso. Un montañero valenciano de 58 años, presentaba una lesión en el tobillo de camino al Aneto. El herido fue trasladado a la helisuperficie de Benasque y de allí al consultorio médico de esa localidad.
Dos avisos más se produjeron en tan sólo de 15 minutos de diferencia. El primero fue un hombre de Tarrasa de 42 años, con una lesión en el hombro que se produjo en el descenso del barranco de Barbaruéns (Seira). Dada la espesa vegetación de la zona, el lesionado tuvo que ser evacuado con grúa.
Por otro lado, dos escaladores, de 37 y 39 años, de Baracaldo y Tudela, que bajaban de la peña Ezcaurre (Ansó), se equivocaron de rápel y quedaron enriscados en medio de la pared. El helicóptero dejó cerca a los especialistas del grupo de Jaca y a un médico, que los subieron hasta lo alto de la pared para poder ser recogidos allí por la aeronave.
Pasó la noche del sábado en un barranco
Un vecino de Zaragoza de 60 años se precipitó la tarde del sábado por el barranco de Añón de Moncayo. Agentes del Equipo de Rescate de Tarazona acudieron a pie hasta el lugar. Acompañado por tres agentes de los grupos rurales de la Guardia Civil, pasó la noche allí. Al día siguiente fue trasladado en helicóptero al hospital Miguel Servet de Zaragoza con una posible fractura de tobillo.
Un domingo marcado por seis llamadas de emergencia
La primera fue para socorrer a un francés de 32 años que no podía bajar desde el refugio de Góriz por un fuerte dolor de rodilla. Además, un senderista se lesionó el tobillo en los Llanos del Hospital (Benasque) al tropezar.
Otra mujer fue trasladada hasta el Hospital San Jorge de Huesca, tras una lesión de tobillo en el barranco Barrasil (Rodellar). Hasta el lugar de los hechos se desplazaron el EREIM de Huesca, el helicóptero de la Unidad Aérea y médico 061.
Más grave fue el accidente de una montañera que cayó bastantes metros en el pico Infiernos y tenía un fuerte golpe en la cabeza. Sin obviar y el de un montañero de 60 años al que le cayó una piedra cuando escalaba en el Monte Perdido y le provocó varias lesiones. Afortunadamente llevaba casco.
Además, se buscó a un hombre que se había desorientado en la sierra de Guara. Pese a ello, fue localizado sin más consecuencia a última hora.
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