
En dos semanas arranca en Soelden la Copa del Mundo 2016-2017 y Ted Ligety está a punto para volver a competir después de superar una rotura del ligamento anterior cruzado de su rodilla derecha, lesión que se produjo entrenando el pasado mes de enero y de la que fue operado en febrero.
“Si Soelden fuese mañana, allí estaría”, ha comentado el doble campeón olímpico (combinada en Turín 2006 y gigante en Sochi 2014) a la web del equipo olímpico estadounidense. En la cita inaugural de la Copa del Mundo Ligety cumplirá nueve meses sin competir. Tras ser operado en febrero siguió un periodo de recuperación y rehabilitación en su casa de Park City (Utah). Volvió a esquiar el 10 de agosto en una primera concentración de pretemporada en Nueva Zelanda y allí aseguró haber tenido muy buenas sensaciones. “Me sentí bien de buenas a primeras”, dijo el esquiador de Salt Lake City.
En septiembre estuvo otras dos semanas en Portillo (Chile) donde, según Forest Carey, entrenador del equipo de slalom y gigante de EE.UU., “no tuvo secuela alguna de su lesión en la rodilla gracias al buen trabajo previo de rehabilitación. Lleva un buen ritmo para poder iniciar la temporada en condiciones”.
Ligety llega este fin de semana a Europa para seguir trabajando antes del pistoletazo de salida. Se muestra optimista al afirmar que “no he bajado el nivel de mis expectativas”. El cinco veces ganador de la Copa del Mundo de gigante ha tenido dos últimas temporadas bastante difíciles.
En la Copa del Mundo 2014-2015 sólo ganó el gigante de Beaver Creek. Se resarció en el Mundial al ganar su tercer título consecutivo de la disciplina en esa misma pista, algo que en categoría masculino sólo había logrado antes Ingemar Stenmark. Además, en Vail se colgó el bronce en la combinada. Ligety cuenta con siete medallas en los Mundiales, siendo el mejor esquiador alpino estadounidense de la historia en los Juegos de Invierno tras ganar por lo menos una medalla en cada cita mundialista desde 2009.
En la Copa del Mundo las cosas no le fueron tan bien porque después de ganar el gigante de Soelden fue segundo en el super G de Beaver Creek de diciembre y cuarto en el gigante antes de Navidad.
Lesión en enero
En la temporada pasada sólo ganó una prueba de la Copa del Mundo, el gigante inaugural de Soelden, prueba que ha ganado en cuatro ocasiones, fue segundo en el super G de Beaver Creek y a partir de ahí, una racha de abandonos hasta que se produjo la lesión el pasado 27 de enero. El período de rehabilitación lo aprovechó para colaborar con sus patrocinadores Shred y Slytech y para casarse el 25 de julio con Mia.
Ligety se muestra muy optimista da cara al inicio de la campaña y asegura que “aunque me habría gustado tener más tiempo para prepararme la verdad es que me siento muy bien y no siento molestia alguna en la rodilla”. Pero Forest Carey se muestra más cauto y afirma que “queda poco tiempo para el inicio de temporada y Ted no ha esquiado lo suficiente; todavía le queda trabajo para llegar al nivel de los mejores”. Tras Soelden Ligety no acudirá a Levi y se centrará en entrenar las pruebas de Beaver Creek a final de noviembre. El gigante y el super G serán sus objetivos para esta temporada, así como el Mundial de St. Moritz. Si en la exclusiva estación suiza volviese a ganar el oro en gigante sería el único esquiador de la historia en ganar cuatro títulos mundiales consecutivos.
Su moral está a prueba de bombas y sus problemas físicos (tiene tres hernias de disco, una cadera dislocada y varios tornillos en una de sus muñecas, no le impiden soñar con un Gran Globo de Cristal (su cuarta plaza en la general final de 2013-2014 es su mejor prestación). “Ganar un Gran Globo siempre ha sido un sueño para mí. Pero que las opciones de hacerlo realidad son limitadas”, admite Ligety.