Otro mes más, echamos un vistazo a los dos grandes modelos estacionales que intentan predecir cómo será el mes de julio de forma general tanto en el ámbito de temperatura como de precipitación. Tan sólo son una tendencia y no una previsión meteorológica.
Como siempre, utilizamos el modelo Americano de la @noaa basado en el modelo CFS a largo plazo y el Copernicus, en el modelo Europeo ECMWF. Es importante recalcar que su nivel de probabilidad es, a menudo, bastante bajo, pero no dejan de ser herramientas útiles y valorables.
La tendencia de ambos modelos es bastante homogénea en cuanto a las precipitaciones. Los dos ven precipitación por encima de la media climática, lo que sería una fantástica noticia y sobre todo el americano es muy optimista. En cuanto a temperaturas son la cara y la cruz, mientras el modelo centroeuropeo ve temperaturas claramente por encima de media climática, el americano las ve en media. Hay que ver como acaba, pero mirando las previsiones este inicio de junio podrían estar en promedio.

Para entender algo mejor qué es un modelo estacional y qué variables utiliza para determinar estas tendencias tomamos por ejemplo el modelo Copernicus, Europeo:
Para la predicción de la evolución del clima, los modelos estacionales como Copernicus toman en cuenta varios factores que pueden afectar al clima, incluyendo las temperaturas de la superficie del mar, las corrientes oceánicas, las variaciones en la radiación solar, y las emisiones de gases de efecto invernadero, entre otros.
Para realizar una predicción, el modelo Copernicus utiliza datos de observación recogidos en tiempo real, así como datos históricos, para generar simulaciones del clima. Estas simulaciones se utilizan para predecir las tendencias climáticas futuras, incluyendo las temperaturas, precipitaciones y otras variables climáticas.
Los datos que se tienen en cuenta en el modelo Copernicus varían dependiendo de la región geográfica y de la variable climática que se esté estudiando. Por ejemplo, para predecir la temperatura en Europa, el modelo utilizaría datos sobre la temperatura de la superficie del mar y otras variables oceánicas que afectan al clima en la región.
Modelo Europeo, Copernicus:
Este modelo pinta un julio cálido con temperaturas de 0,25/1 grado por encima de la media e incluso la parte de los Pirineos como la costa y extremo sur anomalías de 1/1,5 grados. En cuanto a la precipitación vería precipitación por encima media, e incluso el área del Pirineo y Prepirineo y puntos Cat central aún más regadas, lo cual es una fantástica noticia.
Modelo América o de la NOAA
Al igual que el modelo Europeo, éste marca temperaturas por encima media. Eso sí de 0,5 a 1 grado, exceptuando el extremo sur donde estarían de 1 a 2 grados por encima media climática. Por tanto, calor. En cuanto a precipitaciones, marcaría claramente el Pirineo por encima media climática y por lo general mitad norte, mientras el resto estaría en media que realmente es poco teniendo en cuenta que julio es uno de los meses más secos.


Previsión por semanas para julio
Hacemos mirada del modelo CFS en su previsión por semanas (media de ensambles). Este modelo solo llega hasta el 19 de julio y recordemos tiene 4 actualizaciones diarias a pesar de ser una media de ensembles (conjunto de probabilidades).
Nos muestra anomalías en la altura geopotencial a 500hp, es decir terreno por bajas o danas si es azul y anticiclones o cuñas si es rojo. De cara a los próximos días tendríamos y siguiente semana habrá una gran área de bajas presiones y un zonal bajo, haciendo de barrera y con números de una cuña anticiclónica. La siguiente semana un área de bajas presiones puede tomar latitudes más nórdicas y, por tanto, tomar algún surco de onda corta con atascos fríos asociados. Los dos últimos bloques de 5 días dominados por las altas presiones y tiempo más estable exceptuando precipitaciones orográficas Pirineo.