La nieve rosa, conocida como nieve roja. Ya conocida en la antigüedad, parece ser cada vez más frecuente en las grandes altitudes, así como en las regiones árticas y antárticas. Se trata de una microalga hace que la nieve se derrita más rápido.
Con un clima tan cambiante, las montañas se ven afectadas. El retroceso de los glaciares es una realidad, al igual que el descenso del nivel de agua, entre otros efectos. Los ecosistemas se han visto expuestos a los efectos del cambio climático.

FOTO: Kilian Jornet
Proyecto ALPALGA estudia las microalgas que crecen en alta montaña
Para conocer en detalle todos estos trastornos, ha nacido el proyecto ALPALGA en Europa. Se estudia cómo estas algas soportan unas condiciones de temperatura y luz solar tan extremas. Sin obviar, los efectos que están teniendo estas floraciones en el deshielo y cómo está influyendo el calentamiento global en todo este proceso.
El proyecto cuenta con la participación cinco laboratorios de Grenoble, y el apoyo de la Agencia Nacional de Investigación y la Fundación Kilian Jornet. La asociación se compone de biólogos, ecólogos y glaciólogos que estudian las microalgas que pueblan los ecosistemas de los 1.000 a los 3000 metros.
El asunto tiene una justificación biológica con nombre propio: Chlamydomonas Nivalis. En el siglo XIX, se descubrió que el color rojizo de la nieve se debía a la proliferación de esta especie de alga verde, cuyo pigmento carotenoide rojo teñía el característico blanco del hielo de rosa. Es criofílica (amante del frío) y prospera en aguas heladas, de ahí que la nieve rosa sea común en las regiones polares alpinas y costeras.
Jornet toma muestras de la microalga en Noruega
Kilian Jornet no duda en poner su granito de arena en este proyecto. No en vano, ha aunado esfuerzos con Eric Maréchal, director de Investigación en el CNRS, en el Laboratoire de Physiologie Cellulaire et Végétale (LPCV).

FOTO: K. Jornet
“Este año Eric me regaló unos tubos para la recogida de muestras. Sin embargo, en Himalaya no encontré ninguna alga en altitud, pero hoy en uno de mis entrenamientos, cerca de mi casa en Noruega pude tomar algunas muestras de la nieve para el proyecto ALPALGA”.