Un esquiador de 61 años fallecía esta semana al estrellarse en una montaña de nieve de la estación de de Brighton Ski Resort. El aficionado, que esquiaba con su hijo, sufrió una importante lesión cerebral que le causó la muerte.
El esquiador estaba en Brighton junto a su hijo
Ambos pasaban por una zona donde estaban en marcha los cañones de nieve. El hombre tuvo la mala fortuna que la nieve le tapó por completo sus máscaras, y le quitaron la visión. No en vano, el malogrado choco contra una pared de nieve.
Su familia relató que el servicio de seguridad de pistas trabajaron durante más de media hora para estabilizarlo. Rápidamente fue trasladado en helicóptero al hospital, donde falleció al poco tiempo.