La británica Sarah Lewis, que ocupó el cargo de secretaria general de la Federación Internacional de Esquí (FIS) desde 2000 hasta el pasado octubre, cuando fue cesada de forma fulminante, ha anunciado su candidatura a la presidencia del organismo internacional.
Lewis, de 57 años, aspira a suceder al suizo Gianfranco Kasper, que ejerce de presidente desde 1998. Su predecesor fue también otro suizo de larga duración, Marc Holder, que ostentó la presidencia durante 37 años. De ganar las elecciones que se celebrarán el 5 de junio en Portoroz (Eslovenia), Lewis sería la primera mujer en presidir la FIS en sus 97 años de historia.
La ex esquiadora británica vuelve a presentar su candidatura, esta vez avalada por la federación belga, sin miembros en el Consejo de la FIS, y ha manifestado que renunciará al sueldo de presidenta en caso de ser elegida. Tras su cese como secretaria general abandonó momentáneamente su carrera hacia la presidencia.
Lewis fue durante muchos años la mano derecha de Kasper pero la relación acabó deteriorándose, hasta el punto de apenas dirigirse la palabra en los últimos tiempos. Finalmente fue cesada de forma fulminante y se le acusó de realizar viajes para su campaña electoral a cargo de la federación internacional.
La candidata tomó parte en los Juegos de Invierno de Calgary 1988 pero no acabó la primera manga ni del gigante ni del slalom. En la carrera por la presidencia se encontrará con tres rivales. Son el suizo Urs Lehman, ex campeón del mundo de descenso en Morioka 1993 y presidente de Swiss-Ski, el sueco Johan Eliasch, presidente de Head y propuesto por la federación británica por delante de Lewis, y el también sueco y avalado por la federación de su país Mats Arjes, vicepresidente de la FIS.
El relevo de Kasper debía haberse producido en el Congreso de Pattaya previsto para mayo del año pasado y que fue cancelado a causa del Covid-19.