Michaela Kirchgasser podría tener un final amargo de su carrera deportiva. La austriaca tenía previsto colgar los esquís a final de temporada y en los Juegos de Pyeongchang donde trataría de ganar una medalla olímpica, la única que le falta en su palmarés. Kirchgasser se rompió el ligamento cruzado derecho y se produjo una contusión ósea en la misma rodilla durante la clasificatoria del slalom paralelo nocturno de Courchevel del pasado miércoles.
Trasladada a Innsbruck, se ha confirmado el pronóstico y deberá pasar por el quirófano. Los médicos se muestran optimistas, dando un plazo de un mes o mes y medio para su completa recuperación. Pero en el caso de que sea así no irá a los Juegos porque le faltará ritmo de competición y resultados fiables para ser seleccionada.
Kirchgasser, de 32 años, cuenta con tres victorias y 17 podios en la Copa del Mundo. Fue plata en el slalom del Mundial de Schladming de 2013 y doble bronce en las combinadas de los Mundiales de Vail 2015 y St Moritz 2017.
Su carrera se ha visto interrumpida en varias ocasiones por las lesiones y volvió a competir en el slalom de Levi a mitad de noviembre. En marzo pasado fue operada de la rodilla izquierda tras romperse el cruzado izquierdo. Kirchgasser tuvo su mejor rendimiento en la Copa del Mundo 2011-2012, cuando ganó los slaloms de Kranjska Gora y Schladming. Su primera victoria la obtuvo en el gigante de Sierra Nevada en febrero de 2007. Su mejor actuación en unos Juegos fue una quinta plaza en el slalom de Sestriere 2006.