Grandvalira ha acogido casi 60.000 esquiadores en el Puente de la Purísima, con una media de doce mil en los cinco días (del 6 al 10). La media diaria se ha aumentado respecto al año pasado (ocho mil diarios), en la que el periodo festivo fue de nueve días.
La ola de frío ha facilitado las cosas en Grandvalira y ha hecho trabajar intensamente a los equipos de pistas, que han acumulado 2.300 horas de pisado y la nieve artificial se ha podido producir en unas condiciones idóneas.
Grandvalira ha podido mantener abiertos sus seis sectores, todos ellos enlazados a excepción de la conexión entre Grau Roig con Soldeu. Han sido casi 100 km esquiables los que han podido disfrutar los visitantes con un grosor de nieve de entre 30 y 70 cm y en condiciones irregulares.
Dos de los tres snowparks ya están en marcha, el de El Tarter y el Sunset Park Peretol. El primero cuenta con una línea de iniciación de siete módulos y la idea es seguir ampliando mientras que el segundo tiene abiertas dos líneas de módulos abiertos y el Street Plaza con una loma de 4 módulos multifunbox y big piramide. Está abierto de martes a domingo de 15 a 21 horas.

Conexión Soldeu-Grau Roig
Durante el Puente ha funcionado el servicio de autobús gratuito entre los distintos sectores. Catalunya, sur de Francia, Madrid, País Vasco y Valencia han sido los lugares de procedencia de la mayoría de esquiadores.
Se espera abrir lo más pronto posible la conexión entre Soldeu y Grau Roig, algo que será viable en los próximos días gracias a las previsiones de precipitación que permitirá abrir más pistas el próximo fin de semana.
Tanto la Escuela de Esquí y Snowboard y los puntos de restauración ya funcionan a pleno rendimiento, así como buena parte de las actividades de aventura.
El próximo sábado, día 16, L’Abarset (sector El Tarter) recibirá una nueva sesión de après-ski a cargo del artista invitado, Uner. Y la terraza solarium del Iglú Hotel (sector Grau Roig) contará con sesión de dj con estilo house tanto sábado como domingo desde las 13h hasta las 15.30h.