La temporada de esquí llega a su fin. Y no por falta de nieve, sino por falta de clientes. El fin de semana promete todavía un inmejorable esquí. Las pistas que siguen abiertas en la Península son Masella y Cauterets en los Pirineos catalán y francés, y Sierra Nevada, en la cordillera Penibética.
Un sábado y domingo que vendrán marcados por el tiempo anticiclónico, tal y como apunta Dani Ramírez, meteorólogo de la televisión autonómica de Catalunya. Y es que después de la tempestad vuelve la calma. Pero con cautela. La nieve podría despedir el mes de abril, llegando a los 700 metros y con gruesos importantes.
Tal y como apunta el refrán, “no te quites el sayo hasta el cuarenta de mayo“. La bolsa de aire frío que ha afectado esta semana al centro de Europa ha dejado estampas más propias del invierno que de la primavera.

Así nevaba ayer en las pistas francesas de esquí de Val Thorens
El buen tiempo será la tónica del fin de semana en todos los valles de montaña. En opinión de Dani Ramírez;
El sol será protagonista como mínimo hasta lunes próximo. Las temperaturas subirán sensiblemente domingo. Se esperan 10º C a 1.600 metros.
El tiempo primaveral tiene los días contados, y volverá el tiempo invernal.
El cambio dará comienzo el martes próximo. Las temperaturas bajarán por debajo los 0º C en la cota 1.600. Un frente atlántico del noroeste incidirá en la Península entre miércoles y jueves.
La nieve será protagonista este final de la temporada.

La cota de nieve descenderá el miercoles y jueves, 25 y 26 de abril, hasta los 700 u 800 metros, con nevadas de entre 10 y 30 cm