Contra todo pronóstico, Queralt Castellet debuta este viernes en las pruebas clasificatorias del half pipe. La sabadellense ha podido recuperarse mínimamente a tiempo para el Campeonato del Mundo de Snowboard y Freestyle Ski. Castellet volverá a volar alto y deleitará al público con los trucos tan arriesgados, que sólo ella sabe hacer.
Queralt sufrió una caída hace unos días mientras entrenaba en el pipe. El impacto le afectó a un hueso de la muñeca, una costilla y varias micro facturas en una vértebra. Su participación en el Mundial peligraba. Y hasta hace escasos días no sabía si podría participar.
No obstante, la rider catalana declaró después de los primeros entrenamientos que “he estado testando el pipe en relación a mi cuerpo y la prueba ha sido positiva. He sentido algo de dolor pero era soportable. Espero poder pelear en condiciones en la clasificación del viernes”. Junto al half pipe y el big air, Queralt tenía que participar también en el slopestyle. Pero finalmente lo ha desestimado y se centrará en las dos primeras.
La subcampeona del mundo de halfpipe en Kreischberg 2015, sigue un proceso de recuperación a base de fisioterapia, y lleva una férula que inmoviliza su muñeca. “Estoy mucho mejor ya, y sobre todo de cara a las pruebas de Big Air de la semana próxima”, expone. Y añade que “Así es el deporte que practico, una actividad de impacto, y por la que lucho día a día contra estas adversidades”.
EL DEPORTE NO LE VIENE POR AÑADIDURA A CASTELLET
Se trata de la primera española que ha conseguido una medalla en unos Mundiales de snowboard. Y es que la catalana se dedica en cuerpo y alma al deporte desde muy pequeña. Con sólo cuatro años ya deslizaba con esquís sobre la nieve. Pasión que heredó de sus padres. Pero pronto supo que lo suyo era el snowboard, donde destacó rápidamente por sus grandes habilidades deportivas. Y así fue como comenzó su carrera competitiva.