Atención al esquí fuera pista. La nevada de inicios de semana dejaba una estampa completamente blanca. La nieve, acompañada por vientos de levante, ha dejado nuevos gruesos en la cara sur de los Pirineos. En algunos casos, la nieve ha llegado a los 50 cm. Y si a mediados de semana el riesgo de aludes estaba en un nivel de 4 sobre 5 en la escala europea, éste ha bajado a 3.
El fin de semana se presenta óptimo para la práctica del esquí, y la nieve hará las delicias de los aficionados. Varias estaciones se vieron obligadas a cerrar sus instalaciones, o parte de ellas durante este episodio meteorológico. El objetivo fue hacer bajar los aludes de forma preventiva y controlada.
Cuando se está enganchado al deporte blanco, la nieve polvo se convierte en reto y el esquí fuera pista en el principal objetivo
Pese a ello, no hay que bajar la guardia. Las actuaciones en prevención de aludes sólo se realizan en el ámbito de las propias estaciones. Antes de salir fuera pistas conviene estar informado del nivel de aludes para ese día.
ESQUÍ FUERA PISTA, UNA RETIRADA A TIEMPO ES UNA VICTORIA
Los centros invernales ofrecen esta información diariamente actualizada. Una información que se emite a diario a través del boletín de peligro de aludes que otorga el Institut Català Geolègic de Catalunya, Protecció Civil de Andorra o la Agencia Estatal de Meteorología, entre otros.
Cierto que el riesgo cero en la montaña no existe. Pero la práctica del esquí de montaña o el Freeride requieren llevar siempre el Detector de Víctimas de Aludes (DVA), pala y sonda. Igualmente, hay que contratar un seguro de accidentes y tener en el teléfono las App My 112 o Alpify.
