
El litigio entre Henrik Kristoffersen y la federación noruega, Norges Skiforbund, está a la espera de la sentencia del tribunal de Oslo que el miércoles celebró la audición y escuchó a los abogados del esquiador. Fue su padre, Lars Kristoffersen, quien interpuso una demanda pidiendo una compensación de casi 1,7 millones de euros por los perjuicios que le ocasiona la normativa federativa al impedir que Kristoffersen luzca en su casco el logotipo de Red Bull, patrocinador personal, porque ese espacio es exclusivo de la compañía telefónica noruega Telenor, el sponsor de la federación.
Según la TV noruega, NRK, federación y Telenor están tratando de encontrar una solución y el secretario general de Norges Skiforbund, Stein Opsal, ha manifestado que el conflicto lo ha originado una negligencia de Kristoffersen que firmó un contrato con Red Bull cuando sabía que Telenor había mostrado su disconformidad con este tipo de acuerdo.
Por su parte, Red Bull ha dado un ‘ultimatum’ al esquiador y ha hecho saber que si el caso no se ha resuelto antes del 10 de diciembre buscará un sustituto para Henrik.